martes, 6 de noviembre de 2018

Proyectos de futuro.


La legislación y las nuevas corrientes educativas apuestan y nos empujan cada día más por un aprendizaje integrador, que relaciona todas las áreas y que desarrolla competencias en lugar de contenidos.
Como docente, tendemos a seguir con el método con el que hemos estado trabajando durante años, es más, nos sentimos más seguros al repetir los patrones que vivimos de estudiantes, con los que nos enseñaron a nosotros...
Pero, hay que reflexionar, probar y este ejercicio es el que nos hace avanzar.
Sobre el Aprendizaje Basado en Proyectos, hay muchos miedos, rumorología y errores a la hora de planificar y preparar nuestra práctica docente:
- "No hay que programar".
No, no es cierto, hay que programar y planificar. Lo que ocurre, es que cambia el modo de hacerlo. Debemos manejar el currículo de nuestras áreas, los indicadores, las competencias que queremos desarrollar en nuestro alumnado.
En lugar de elegir un topic o centro de interés sobre el cual construir nuestra unidad didáctica: farm animals, family or Hallowe'en, voy a centrarme en los indicadores: LE.3.1.1 Comprende y distingue estructuras simples y léxico de uso habitual, articulados con claridad y transmitidos oralmente o por medios técnicos, tales como anuncios, programas de radio y televisión, etc, sobre temáticas conocidas en contextos cotidianos relacionados con la propia experiencia, necesidades e intereses, siempre que las condiciones acústicas sean buenas y no distorsione el mensaje, se pueda volver a escuchar o pedir confirmación. Sin olvidar las destrezas: listening, reading.., para diseñar actividades, ejercicios, recursos, encaminados a realizar una tarea.
Aquí os dejo recursos que uso para la planificación y la programación.



- "Ya no se hacen  exámenes".
La verdad es que este es el punto más conflictivo de trabajar a través de tareas-proyectos-U.D.I, la evaluación.
El concepto de evaluación en sí, crea repulsa y pone los pelos de punta. Yo tuve la inmensa suerte en la facultad de Ciencias de la Educación, de dar la asignatura de evaluación de lengua extranjera con Pilar Montijano, que nos transmitió un concepto más amplio de assessment siendo más que el diseño de una prueba final.

Fenton (1996), "Assessment is the collection of relevant information that may be relied on for making decisions. Evaluation is the application of a standard and a decision-making system to assessment data to produce judgments about the amount and adequacy of the learning that has taken place." Too often these processes are confused... we say assess, but we mean evaluate... or we use the term evaluation, when we really are doing assessment. "

Esto chocó mucho con lo que había vivido en mi vida escolar y que aún estaba viviendo en la Universidad.
Creo, que tanto la administración educativa, docentes, familias y alumnado tenemos demasiada fijación con la evaluación, con el resultado final. De este modo, de una manera inconsciente, estamos quitándole importancia al proceso de aprendizaje en sí. Cuando es en este donde el alumnado aprende, se esfuerza, progresa y se desarrolla realmente. Hasta aquí, pensareís-!Estupendo¡- pero eso ¿cómo se hace?
Pues, en lugar de usar un único instrumento de evaluación, vamos a abrir nuestras mentes y poco a poco vamos a introducir nuevas formas y momentos de evaluar.
Aquí os voy a confesar que he pasado por varias fases:
-Fase LO DE SIEMPRE. Sí, lo reconozco, en un pequeño periodo de tiempo fui aquella seño que realizaba exámenes tanto orales como escritos al final de la unidad.
Esta fase me duró poco, ya que me dí cuenta que a pesar de adaptar los exámenes de la editorial y preguntar de forma oral, me faltaba algo.


-Entonces pase a la fase del DESPERTAR. Descubrí las ventajas de trabajar mini-proyectos y rincones de trabajo. Empecé a valorar la presentación, la expresión oral, incluso trabajos voluntarios  y extras. Ganando confianza con esta nueva metodología y aprendiendo de compañeros y compañeras con los que coordinarse es un placer y te dan una formación que vale millones, atracamos en la fase EVALUATITIS AGUDIS.


Fascinada por la variedad de nuevos instrumentos, pase una racha poseída por los cuadros de doble entrada, las maravillosas ideas de pinterest que me enviaban de una web a otra en un viaje sin fin de fichas, ideas, portfolios... ¡¡¡TENÍA QUÉ PROBARLAS TODAS!!!
El problema llegó a la hora de transformar esa cantidad de datos en una única nota, en un número que no reflejaba, ni el trabajo del estudiante, ni la cantidad de datos que había recogido.
- Con esta disyuntiva, nos adentramos en la fase CADA INSTRUMENTO PARA UN FIN. La evaluación no debe evitar que atendamos al alumnado, debemos adaptar y temporalizar un instrumento para cada momento y muy importante darle un peso un valor a cada uno.

Espero, que os haya servido de ayuda.
En la siguiente entrada, U.D.I de Picasso (actividades, ejercicios y tarea final).